"MISHKÁN"
El Tabernáculo en el
desierto
La palabra "tabernáculo" se deriva del latín "tabernaculum",
derivado de
"taberna" que es también "habitación".
Pero en hebreo, la palabra es:
"Mishkán מִשְׁכָּן"
y era una
especie de Templo o santuario portátil.
Era un lugar muy santo y de mucha solemnidad, pero a la vez de sumo gozo,
ya
que el Altísimo se reunía con su pueblo y su presencia era palpable, llenando
todo el lugar.
En Éxodo leemos que cuando Moisés y el pueblo terminaron de construir
el
Mishkán siguiendo al pie de la letra las instrucciones de YHVH, su gloria llenó
todo el lugar, en una especie de "consagración" de todos los utensilios,
de tal manera que ni Moisés pudo entrar al lugar.
"Entonces la nube cubrió el tabernáculo de reunión, y la gloria del SEÑOR
llenó la morada. Moisés no podía entrar en el tabernáculo de reunión,
porque la nube estaba sobre él, y la gloria del SEÑOR había llenado
la morada"
Éxodo 40:34-35
llenó la morada. Moisés no podía entrar en el tabernáculo de reunión,
porque la nube estaba sobre él, y la gloria del SEÑOR había llenado
la morada"
Éxodo 40:34-35
También leemos que la nube de YHVH cubría el Mishkán de día, y su fuego
reposaba sobre éste de noche a la vista de todo el pueblo de Israel.
" En todas sus etapas, cuando la nube se levantaba del tabernáculo, los hijos de Israel partían; pero si la nube no se levantaba, no partían hasta el día en que ella se levantaba. Porque en todas sus etapas, la nube del SEÑOR estaba de día sobre el tabernáculo; y el fuego estaba allí de noche, a la vista de toda la casa de Israel"
Éxodo 40:36-38
Así, la presencia de Dios moraba en medio de su pueblo mientras éste se dirigía
a la tierra prometida.
El "Mishkán מִשְׁכָּן" era el lugar de adoración y de
ofrendas sacrificiales, y
servía también como una señal de tránsito, pues
indicaba al pueblo cuándo tenían
que detenerse en algún lugar, y cuándo seguir caminando.
"Mishkán מִשְׁכָּן"
Sus letras hebreas son:
Mem מ
Agua- Fluir
Shin ִש
Dientes-Consumir-Poder del Todopoderoso
Caf כ
Mano Abierta-Dar y recibir
Nun ן
Semilla- Vida
Uniendo el significado de sus letras, nos dice:
"El poder del Todopoderoso fluye para
darnos vida"
Este lugar también hace referencia a Yeshua y a nuestros cuerpos como templos
en donde habita la presencia de nuestro Elohim por medio de su
Ruaj (Espiritu
Santo).
Después del Edén, el cual también fue un tipo de Mishkán, del propio Mishkán
en el
desierto y del templo construido por Salomón, Dios habitó en medio de la
humanidad a través
de su hijo.
"En el principio ya existía la Palabra. La Palabra estaba con Dios,
y
Dios mismo era la Palabra"
Juan 1:1
"Y la Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros y vimos su
gloria
(la gloria que corresponde al unigénito del Padre) llena de
gracia y de
verdad"
Juan 1:14
La palabra “habitó” en griego es:
que es "extendió su tienda/tabernáculo"
(Vino el Mishkán a nosotros a
través de Yeshua).
Yeshua mismo fue el mishkán, el lugar de morada entre YHVH y su pueblo.
Él fue
el verdadero tabernáculo que levantó el Señor, y no el hombre.
"En resumen, lo que venimos diciendo es esto: Tenemos tal sumo sacerdote
que se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos, ministro del
lugar santísimo y del verdadero tabernáculo que levantó el Señor y
no el hombre"
Hebreos 8:1-2
"Yeshúa le dijo:
Tanto tiempo he estado con ustedes, Felipe, ¿y no me has conocido?
El que me ha visto, ha visto al Padre. ¿Cómo, pues, dices tú:
“Muéstranos el Padre”?
¿No crees que yo soy en el Padre
y el Padre en mí?
Las palabras que yo les hablo, no las hablo de mí mismo sino que el Padre
que mora en mí hace sus obras"
Juan 14:9-10
Después de que Yeshua resucitó y ascendió a los cielos, prometió regresar y
enviar al Ruaj (Espíritu de santidad) a nosotros para morar en cada uno de los que
conforman su pueblo santo. (Hechos 1:8-9)
"¿Qué acuerdo puede haber entre un templo de Dios y los ídolos? Porque
nosotros somos templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y
andaré entre ellos. Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo"
2 Corintios 6:16
Todos los que hemos experimentado un nuevo nacimiento, por medio de un
"bautismo del
Ruaj de santidad", somos ahora el "Mishkán".
"¿No saben que son templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en ustedes?
Si alguien destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él; porque santo es el templo
de Dios, el cual son ustedes"
1 Corintios 3:16-17
"Si me aman, guardarán mis mandamientos. Y yo rogaré al Padre y
les dará otro Consolador para que esté con ustedes para siempre.
Este es el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede recibir porque
no lo ve ni lo conoce. Ustedes lo conocen, porque permanece con ustedes
y está en ustedes"
Juan 14:15-17
"Y si el Espíritu de aquel que resucitó a Yeshúa de entre los muertos mora en
ustedes, el que resucitó al Mesías de entre los muertos también les dará vida
a sus cuerpos mortales mediante su Espíritu que mora en ustedes"
Romanos 8:11
Sabiendo que en el reino venidero hay un Mishkán glorioso y eterno que nos
espera.
"Porque sabemos que si nuestra casa terrenal, esta tienda temporal, se
deshace, tenemos un edificio de parte de Dios, una casa no hecha de manos,
eterna en los cielos"
2 Corintios 5:1
YHVH siempre ha deseado morar con su pueblo en estrecha comunión.
Toda la
Escritura nos muestra el plan perfecto de Dios para nuestras vidas.
Después de que YHVH liberó a su pueblo de aquella larga esclavitud en Egipto, la cual
duró 400 años, los llevó a través del desierto hasta llegar a la tierra
prometida.
Espiritualmente, Dios nos libera de la esclavitud del pecado (Egipto) y desea
morar con nosotros y darnos vida eterna, pero también es necesario establecer
un orden en nuestras vidas y corregirnos al igual que lo hizo con los
Israelitas
en el desierto.
La presencia de Dios constante en nuestras vidas es el mayor deleite al que
podemos
aspirar; tal como lo hicieron Adán y Eva en el Edén, los israelitas con
el Mishkán y posteriormente, el templo.
Y ahora nosotros por medio del bautismo
del Espíritu Santo (Ruaj), a través del cual,
nuestros corazones son
transformados anhelando guardar sus mandamientos,
tenemos la señal de estar en pacto
con el Eterno.
"Porque este será el pacto que haré con la casa de Israel después
de aquellos días, dice el SEÑOR: Pondré mi ley en su interior
y la escribiré en su corazón. Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo"
Jeremías 31:33
Estudiando sobre el Mishkán, sobre los levitas, el sacerdocio, los protocolos,
las ofrendas, instrumentos y en general, todas sus leyes, podemos aprender
sobre
la relación que Dios quería establecer con su pueblo desde el principio
de los tiempos.
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