ARBOL DE NAVIDAD

 

El árbol de Navidad es sin duda alguna, el  símbolo que más se destaca 

en el festejo de la Navidad.  Cientos de millones de personas 

alrededor del mundo compran un pino para llevarlo a sus casas y decorarlo

 con brillantes esferas de colores, listones de oropel y luces. 

Estas personas nunca piensan del árbol de Navidad como un “idolo” al cual

 Dios aborrece, pero la realidad es que la adoración a los árboles está 

desde los inicios de la historia.


¿QUÉ DICE LA BIBLIA AL RESPECTO?


 “Así dijo YHWH: No aprendáis el camino de las naciones, 

ni de las señales del cielo tengáis temor, aunque las naciones las teman. 

Porque las costumbres de los pueblos son vanidad; 

porque leño del bosque cortaron, obra de manos de artífice con buril. 

Con plata y oro lo adornan; con clavos y martillo lo afirman para 

que no se mueva. Derechos están como palmera, y no hablan; 

son llevados, porque no pueden andar. No tengáis temor de ellos, 

porque ni pueden hacer mal, ni para hacer bien tienen poder” 

Jeremías 10:2-5.


 “Y los hijos de Israel hicieron secretamente cosas no rectas 

contra YHWH su Elohim, edificándose lugares altos 

en todas sus ciudades, desde las torres de las atalayas 

hasta las ciudades fortificadas, 

y levantaron estatuas e imágenes de Asera en todo collado alto, 

y debajo de todo árbol frondoso, y quemaron allí incienso en todos

 los lugares altos, a la manera de la naciones que YHWH 

había traspuesto de delante de ellos, e hicieron cosas 

muy malas para provocar a ira a YHWH” 

2 Reyes 17:9-11


 Lo sorprendente es que a pesar de leer en las Escrituras que ISRAEL

 fue castigado por IMITAR los cultos paganos de las naciones a su alrededor,

 el Cristianismo no destruyó este paganismo y su adoración, sino que lo adoptó.

 En la actualidad, millones de hogares cristianos alrededor del mundo 

están adornados con árboles verdes cada Navidad con su brillante estrella

 en la punta, símbolo indudable de la adoración al sol y con los regalos 

bellamente envueltos bajo sus ramas.


 En cuanto a los regalos de Navidad, la mayoría de las personas cree

 que esa tradición viene de la Biblia, ya que los hombres sabios que llegaron

 a ver a Yeshúa, le dieron regalos y, por lo tanto, se considera apropiado 

para la cristiandad el darse regalos los unos a los otros. Sin embargo, 

esta práctica nada tiene que ver con aquellos sabios del oriente y sí tiene 

mucho que ver con los regalos que eran intercambiados en Roma

 durante la Saturnalia, precisamente el 25 de diciembre.


En Roma, los regalos eran de velas de cera y muñecas,

 las cuales se tomaban de los residuos de los sacrificios humanos 

que eran ofrecidos a Saturno.


Es importante puntualizar que los sabios del oriente no se dieron 

regalos unos a otros y que los regalos dados a Yeshúa no fueron regalos 

de cumpleaños. Yeshúa no recibió juguetes de estos visitantes, 

sino ofrendas con un profundo significado, ya que las personas de oriente 

nunca se presentaban ante los reyes o grandes personajes sin un

 presente en las manos.

 Esta práctica de intercambiar regalos además de tener sus bases

 en la adoración a Saturno, emerge con la adoración a Mammón, 

el dios del dinero.


 Aquí solo algunos datos:

 

·        Cifras de las asociaciones de árboles de Navidad en EE.UU., 

indican que para la temporada navideña se venden cada año cerca de

 40 millones de árboles, de los cuales 27 millones son naturales

 y 13 millones artificiales.


·        Hallmark (prestigiosa manufacturera de papel) anunció que

 durante la temporada de Navidad produce más de 38,600 kilómetros

 de papel para regalo.


·         USA gasta más de 7 billones de dólares en juguetes 

cada temporada navideña.


·        Solo en Los Ángeles, se consumen 10 millones de kilowatts de 

electricidad para alimentar las luces de Navidad.


·        Sin embargo, hasta un 40 % de los estadounidenses solamente,

 recurrirán al alcohol o a las drogas debido a la depresión ocasionada

 por el vacío que sienten durante este “gozoso” tiempo del año.


 

Financieramente hablando, la Navidad es tan importante 

en la economía de los EEUU y de ya todo el mundo, 

que la ausencia de tal día literalmente

 podría paralizar al País. 


La Navidad es sin duda un día dedicado al materialismo.


Ante estos datos duros sobre la Navidad, se escucha a predicadores, 

pastores o líderes cristianos amonestar sobre este comercialismo 

de la Navidad y de manera indignada exclamar frases como:


 

- ¡¡Tenemos que regresar a Cristo a la Navidad!! -



Pero la verdad es que nuestro Mesías 

NUNCA ha estado en la navidad

 y NUNCA lo va a estar.


 Hay quienes insisten en celebrar esta fiesta argumentando que ahora 

no es para el Sol, sino para honrar a “Jesucristo”…


¿Pero que dice la Escritura?


 “No caigas en la trampa de seguir sus costumbres ni de rendir 

culto a sus dioses. No preguntes acerca de sus dioses diciendo:

 “¿De qué manera rinden culto estas naciones a sus dioses? 

Yo quiero hacer lo mismo”. Tú no adorarás al Señor tu Dios de la manera 

que las otras naciones rinden culto a sus dioses, llevando a cabo en honor 

de ellos toda clase de actos detestables que el Señor odia. 

Hasta sacrifican a sus hijos y a sus hijas en el fuego como ofrenda 

a sus dioses” Deuteronomio 12:30-31 NTV


 Yeshúa también amonestaba a los fariseos diciéndoles que invalidaban

 la Palabra de Elohim poniendo a sus tradiciones por encima de ella.


" Y así, por la tradición de ustedes, 

invalidan el mandamiento de Dios"

Mateo 15:6


 y pensamos que esta amonestación nada tiene que ver con nosotros 

o nuestras tradiciones…pero hacemos los mismo.



 

Dibujo creado por Jimena Arce González


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